Batman más real que nunca

UPDATE: Si no puedes esperar hasta el 18 de Julio, te mostramos en adelanto los primeros 5 minutos del filme.





Cuando Christopher Nolan decidió rescatar la franquicia de Batman de sus terribles apariciones fílmicas en los noventas (Joel Schumacher, te estoy viendo), indudablemente atinó al buscar un enfoque más realista del anti-héroe por excelencia.

Basándose en las novelas gráficas que Frank Miller (300, Sin City) produjo como Batman Year One y The Dark Knight Returns, Nolan devolvió la confianza a los fans del caballero de la noche, que tras ver desfilar en el cine superhéroes de Marvel como Spider Man y X-Men, suspirábamos por alguien que le hiciera justicia a uno de los personajes más importantes del arte secuencial.

"Realista" es la palabra que mejor define el trabajo de Christopher Nolan sobre Batman Begins y The Dark Knight, buscando mantener coherencia ante la premisa de qué pasaría si algún vigilante encapuchado existiera en el mundo en qué vivimos, ante qué decisiones morales se tendría que enfrentar y cómo lo recibiría la gente, tanto el aparato de "justicia" representado por la policía en algunos niveles corrupta, como por el crimen organizado, además de la sociedad que vive rehén en medio de estos dos monstruos.

En la secuela de Batman Begins, el aclamado director tiene que insistir en un Joker que también pueda existir en esta realidad. Gracias a la magistral actuación del ya fallecido actor Heath Ledger (que algunos incluso comienzan a señalar como material para un Oscar), tenemos ahora la versión definitiva del Joker: una fuerza incontrolable de la naturaleza, una mente retorcida con sed irrefrenable de anarquía, caos en su más pura y destructora expresión.

Pero este realismo va más allá. Nolan se ha preocupado por no dejarse llevar ante la moda de usar efectos digitales en sus películas y abusar de la famosa pantalla verde. Y para muestra basta un botón.

En el sitio web de la revista Wired nos encontramos con un artículo que trata este tema, comentando acerca de una de las escenas más impresionantes de The Dark Knight. Una caída libre desde un edificio de 88 pisos que fue filmada en Hong Kong, con dos helicópteros (uno para el stuntman y otro para el equipo de filmación) varias semanas de preparación y cero efectos digitales.

Para esta secuela, Nolan ha decidido llevar este realismo a un punto máximo –literalmente. The Dark Knight es la primera película comercial en filmar algunas escenas en el formato iMax, que antes era exclusivo para algunos documentales. Cierto, muchas películas han sido adaptadas para este formato e incluso se les ha añadido 3D, pero nunca fueron filmadas para este formato, desaprovechando la calidad, nitidez, definición que iMax ofrece.

Tan sólo para que se den una idea de la diferencia entre ver una de las películas más esperadas del 2008 en una pantalla de cine normal y una pantalla iMax, sólo chequen la siguiente imagen.


Con un tamaño de 30 por 23 metros que cubre todo el ángulo de visión y capaz de sumergir al espectador en la acción en pantalla, The Dark Knight tiene una razón más para convertirse en la película del año y sin duda alguna, la más realista.

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